Qué es el absentismo laboral: clases y situaciones de despido
11 Junio 2025

El absentismo laboral es un fenómeno que afecta a la productividad, el clima organizacional y la rentabilidad de las empresas, que, en determinadas situaciones, pude conllevar una falta grave, e incluso el despido del trabajador.
En este artículo vamos a ver qué es el absentismo laboral, tipos de absentismo y situaciones que pudieran derivar en el despido.
¿Qué es el absentismo laboral?
El absentismo laboral se refiere a la ausencia del trabajador de su puesto de trabajo durante el horario laboral estipulado. Esta ausencia puede ser justificada o injustificada, puntual o reiterada, voluntaria o involuntaria. Si bien todos los trabajadores pueden faltar a su empleo en determinadas ocasiones por causas ajenas a su voluntad, el absentismo se convierte en un problema cuando es frecuente, injustificado o se produce de forma reiterada sin comunicación previa a la empresa. En ese sentido, se considera absentismo laboral tanto las ausencias (cuando el trabajador no va en todo el día a su puesto de trabajo) como los retrasos.
Está recogido en el artículo 52 del Estatuto de los Trabajadores.
Tipos de absentismo laboral
El absentismo laboral puede clasificarse en diferentes tipos, según su origen, su justificación y su impacto:
Absentismo justificado
Este tipo de absentismo ocurre cuando el trabajador está ausente por una razón válida y respaldada por la ley o por los convenios laborales. Algunos ejemplos son los siguientes:
- Permisos legales (matrimonio, maternidad, paternidad, fallecimiento de un familiar, mudanza, lactancia).
- Vacaciones.
- Huelga.
- Incapacidad temporal por enfermedad o accidente.
- Citaciones judiciales o administrativas.
- Ausencias motivadas por violencia de género.
Absentismo injustificado
Es la ausencia del trabajador sin causa justificada o sin haberla comunicado a la empresa. Estas ausencias pueden ser esporádicas o repetidas, y suelen considerarse una falta disciplinaria. Algunos ejemplos son los siguientes:
- No acudir al trabajo sin previo aviso ni causa aparente
- Llegar tarde de forma reiterada sin explicación
- Faltar varios días sin justificación médica
Absentismo presencial
Este tipo de absentismo se da cuando el trabajador sí acude físicamente a su puesto, pero no realiza las tareas asignadas. Algunos ejemplos son los siguientes:
- Pasar tiempo en redes sociales o realizando tareas personales en horario laboral.
- Disminuir de manera voluntaria la productividad.
- Prolongar innecesariamente descansos o pausas.
Absentismo estructural
Es aquel provocado por deficiencias organizativas o problemas estructurales dentro de la empresa. Algunos ejemplos son los siguientes:
- Condiciones de trabajo desfavorables.
- Malas políticas de gestión.
- Horarios laborales incompatibles con la conciliación personal.
Menos gestiones es más tiempo para tu negocio.
Simplifica tu día a día. Déjanos a nosotros todo el papeleo.
¿Cuándo puede una empresa despedir por absentismo laboral?
El Estatuto de los Trabajadores, en su artículo 54.2.a permite el despido disciplinario cuando un trabajador acumula faltas de asistencia o impuntualidad repetidas e injustificadas.
Para que este despido se considere válido, la empresa debe demostrar que:
- El trabajador ha incumplido su obligación de asistencia sin una causa válida.
- Se han respetado los procedimientos formales en la comunicación del despido.
- Las ausencias son reiteradas y han afectado al funcionamiento de la empresa.
¿Cómo debe notificarse un despido por absentismo laboral?
El procedimiento para el despido disciplinario está regulado en el artículo 55 del Estatuto de los Trabajadores y debe cumplir con ciertos requisitos formales:
- Entrega de la carta de despido.
- Propuesta de finiquito.
- Derecho a representación.
- Si el trabajador es representante sindical, la empresa debe abrir un expediente en el que se le permita defenderse antes de aplicar el despido.
Consecuencias del despido por absentismo laboral
Cuando un trabajador es despedido por absentismo laboral, las consecuencias dependen de la calificación del despido. Las vemos a continuación:
- Despido improcedente: Si el despido no cumple con los requisitos formales o la empresa no prueba los hechos alegados, puede declararse improcedente. En este caso, la empresa debe readmitir al trabajador en las mismas condiciones que tenía antes del despido, abonar los salarios de tramitación o bien abonar una indemnización de 33 días de salario por año trabajo, con un máximo de 24 mensualidades.
- Despido procedente: Si el despido cumple con los requisitos legales y se demuestra que las faltas fueron reiteradas e injustificadas, se considera procedente. En este caso, el trabajador pierde el empleo sin derecho a indemnización. Además, solo recibe el finiquito correspondiente.
- Despido nulo: Un despido puede ser declarado nulo si vulnera derechos fundamentales o se basa en causas discriminatorias. Por ejemplo, porque esté embarazada. Si el despido es nulo, la empresa debe reincorporar al trabajador inmediatamente y abonar todos los salarios dejados de percibir.
¿Es posible evitar un despido por absentismo si el trabajador aporta los justificantes médicos una vez que ya le han comunicado la decisión de despido?
Una vez que un trabajador recibe la carta de despido por absentismo laboral no es posible revertir la situación presentando justificantes médicos en ese momento. Esto se debe a que la empresa ya ha llevado a cabo un análisis previo de las ausencias. Si tras esa revisión la empresa ha determinado que las faltas han sido reiteradas e injustificadas, y ha procedido al despido, la decisión ya está tomada y el contrato de trabajo se considera finalizado.
Sin embargo, si el trabajador tenía justificantes válidos y no los presentó en su momento, puede impugnar el despido. En este caso, debe demostrar ante el juez que las ausencias estaban justificadas y que la empresa no tuvo en cuenta esa información.
Si aún tienes dudas sobre el absentismo laboral, consulta nuestros planes de negocios de Legálitas y te ayudamos a solucionarlas.
Referencia legal: