Qué son los microcréditos para emprendedores
19 Junio 2025

Cualquier empresario que afronta el reto de poner en marcha un negocio o que necesita recibir soporte económico para hacerlo crecer o superar algún bache sabe que el acceso a financiación no es siempre un proceso sencillo. Y en función de las circunstancias, las dificultades prevalecen, incluso, cuando la cantidad no es excesivamente elevada. Los microcréditos surgen, precisamente, como una solución ágil, sencilla y específica para solventar esa dificultad y dar el estímulo económico que necesita el negocio. Su esencia es que facilitan obtener pequeños préstamos sin la exigencia de avales o revisiones profundas del historial económico.
¿En qué consisten los microcréditos para emprendedores?
Se trata de pequeños préstamos que pueden variar entre cantidades inferiores a los 1.000 euros y los 25.000 euros, llegando en algunos casos hasta los 50.000 euros. Están específicamente destinados a personas que quieren iniciar o consolidar un negocio, pero que tienen dificultades para acceder a los canales habituales de financiación bancaria.
Entre los grupos más beneficiados se encuentran, sobre todo, los autónomos sin avales, las pymes recién constituidas o aquellos colectivos que tradicionalmente se encuentran con más dificultades para obtener crédito, como pueden ser los jóvenes, las personas desempleadas o los migrantes.
Una pregunta habitual es ¿qué casuísticas contempla este modelo de financiación más accesible? Principalmente dos, el autoempleo y el pequeño emprendimiento inclusivo. Porque, en muchos casos, no se limitan a facilitar el dinero: algunas entidades públicas y privadas que los conceden ofrecen también formación, acompañamiento y asesoramiento al emprendedor.
Al detenernos en su marco normativo, encontramos que los microcréditos descansan sobre un sólido andamiaje legal. Con el mismo se intenta garantizar la transparencia, protección y viabilidad. Se sustentan, por lo tanto, en diversas leyes a partir de las cuales las entidades públicas o privadas les dotan de sus propias características.
- Ley 5/2015, de fomento de la financiación empresarial. Regula la financiación alternativa a la banca para pymes y emprendedores, fomentando vehículos como las sociedades de garantía recíproca y las líneas de microfinanciación.
- Ley 16/2011, de contratos de crédito al consumo. Entre otros puntos, exige que haya una información clara y comprensible y limita las cláusulas abusivas.
- Directrices de la Autoridad Bancaria Europea (EBA) y normativa del Banco de España sobre evaluación de solvencia y prevención del sobreendeudamiento.
- Código de conducta de microcréditos en la UE. Es un documento de autorregulación que fija estándares de transparencia, ética y seguimiento de impacto social por parte de entidades sociales.
Además, cada comunidad autónoma y muchos ayuntamientos disponen de decretos específicos que cofinancian microcréditos o avalan las operaciones ante entidades financieras.
Cuáles son las características principales que comparten los microcréditos para emprendedores en España
Hay ciertos aspectos en los que coinciden los microcréditos para emprendedores que más certidumbre ofrecen. Si estás buscando un microcrédito para tu negocio, confía sobre todo en aquellos que posean todas, o la mayoría, de estas peculiaridades. Como verás, el propósito de todos es que el emprendedor pueda acceder a ellos con facilidad.
- Rapidez y sencillez en la solicitud. El proceso suele ser 100% online, sin excesivos papeleos ni complicaciones. Puedes completar la solicitud en minutos y recibir una respuesta temprana.
- Importes adaptados a las necesidades del solicitante. Esto está en la propia definición del concepto. Suelen ofrecer cantidades reducidas, que sirvan para arrancar o impulsar tu negocio.
- Plazos de devolución flexibles. Es posible devolver el préstamo en periodos cortos, adaptando la cuota a tu capacidad de pago.
- Transparencia y ausencia de costes ocultos. Confía en aquellas organizaciones o entidades que detallen claramente la TAE, los intereses y las condiciones. Es importante que compruebes que no haya comisiones sorpresa.
- Requisitos mínimos. Basta con ser mayor de edad, residir en España, tener un documento de identidad válido, una cuenta bancaria y, en el caso de los microcréditos más confiables, una justificación de lo que se va a hacer con el dinero en el emprendimiento. No suelen exigir avales.
- Aprobación incluso con historial crediticio limitado. Los microcréditos más flexibles permiten acceder a financiación, aunque no se disponga de avales o se tenga un historial crediticio imperfecto.
- Atención y soporte personalizado. Las entidades ofrecen, en muchos casos, atención durante todo el proceso, resolviendo dudas y ayudando a elegir la opción más adecuada para tu perfil y necesidades.
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Algunos de los productos de microcrédito más confiables en España
En España, existen diversas iniciativas públicas, privadas y cooperativas que ofrecen microcréditos para emprendedores en condiciones favorables. Te señalamos los principales, avalados por entidades sólidas o instituciones públicas y que cuentan con condiciones adaptadas a distintas realidades empresariales.
Programas autonómicos y ayuntamientos
Muchas comunidades autónomas y grandes ayuntamientos gestionan líneas propias, cofinanciadas en muchos casos con fondos europeos. Aunque difieren entre comunidad y el tipo de emprendimiento, suelen ofrecer importes que van de los 5.000 a los 30.000 euros. El plazo de devolución alcanza los ocho años. Existen avales mediante Sociedades de Garantía Recíproca autonómicas, que cubren entre el 60% y el 80% del riesgo.
Entidades sociales y ONG de microfinanzas
Distintas fundaciones y organizaciones sin ánimo de lucro gestionan programas de microcréditos que están especialmente destinados a emprendedores en situación de vulnerabilidad o con dificultades para acceder a la banca tradicional. Habitualmente tienen un marcado carácter social y, además de financiar, acompañan el desarrollo de los proyectos mediante formación y asesoramiento. Resultan apropiados para quienes inician su actividad desde una posición de desventaja o buscan generar un impacto positivo en su comunidad.
Proceso de solicitud
Aunque el procedimiento para obtener el microcrédito para emprendedores difiere en función de la entidad o la institución que lo otorga, existen varios elementos coincidentes en prácticamente la totalidad de ellos.
Preparación previa
- Plan de negocio. Conviene que tenga una extensión media, entre 10 y 15 páginas, que permita detallar el tipo de negocio, el propósito del dinero que se necesita, un plan de empresa, detallar la inversión necesaria, el plan de ventas y las proyecciones financieras.
- Documentación personal. DNI/NIE, Vida Laboral, Declaración de la Renta de los últimos años y extractos bancarios.
- Documentación de la empresa (si ya existe), Escritura de constitución, alta en Hacienda y en el RETA o Seguridad Social.
Presentación de la solicitud
- Registro en la plataforma online de la entidad
- Carga de la documentación en PDF.
- Cuestionario de viabilidad, donde se responden preguntas sobre flujos de caja previstos y destino exacto de los fondos.
- Entrevista personal o telemática, que permite estudiar en profundidad el proyecto.
Proceso de evaluación
- Análisis cuantitativo. Revisión de la salud financiera del solicitante y de las proyecciones de ingresos.
- Análisis cualitativo. Experiencia profesional del emprendedor, solidez del equipo, innovación del proyecto.
- Verificación de requisitos. Cumplimiento de la normativa sectorial (si procede) y de las condiciones de la línea (líneas priorizadas para mujeres, jóvenes, RSC).
Aprobación y firma
- Notificación de la resolución en un plazo, habitualmente, inferior a un mes.
- Firma del contrato. En el mismo de incluyen TAE, comisiones y calendario de amortización detallado.
- Desembolso. Ingreso único en cuenta en un plazo de 5 días tras la firma.
¿Es lo mismo microcrédito y minicrédito?
Realmente no son lo mismo y conviene no confundirlos, ya que ambos productos son muy diferentes en su naturaleza y finalidad.
Como veíamos, un microcrédito está pensado para el desarrollo de una actividad productiva. Se concede tras un análisis del plan de negocio, y con un tipo de interés moderado y plazos que pueden llegar a los 8 años. Además, suele estar vinculado a programas de acompañamiento.
Por su parte, un minicrédito es un préstamo personal de muy pequeño importe, en muchas ocasiones inferior a 1.000 euros, y destinado al consumo o a hacer frente a gastos imprevistos. Los minicréditos suelen concederse sin apenas trámites ni estudios de viabilidad, pero a cambio de un coste muy elevado: los tipos de interés son mucho mayores, los plazos muy cortos y las comisiones altas.
Mientras que el microcrédito tiene un objetivo productivo y busca generar empleo y actividad económica, el minicrédito es un recurso puntual de liquidez, no recomendado para financiar un negocio.
Ventajas de los microcréditos para emprendedores
Está claro que los microcréditos ofrecen numerosos beneficios para el emprendedor. Te señalamos algunos de ellos.
- No requieren avales ni garantías reales y esto favorece especialmente el acceso a quienes empiezan de cero.
- Los tipos de interés son competitivos, inferiores al de los préstamos personales no finalistas.
- Posibilidad de carencia inicial, lo que permite que el negocio arranque antes de empezar a devolver el préstamo.
- Asesoramiento y formación, en muchos casos gratuitos, y que forman parte del programa.
- Fomentan la inclusión financiera y el autoempleo
Aspectos legales y fiscales que debes tener en cuenta si pides un microcrédito
Es importante que seas consciente de que el contrato de microcrédito debe ser muy detallado, claro y transparente. La ley obliga a que se especifiquen todos los términos: tipo de interés, comisiones, calendario de pagos, consecuencias del impago. Y, por supuesto, cualquier coste adicional debe estar indicado.
Fiscalmente, el microcrédito no tributa como ingreso, porque no es una ayuda o subvención. Pese a sus condiciones especiales, es un préstamo que debe devolverse. Eso sí, las cantidades deben registrarse en la contabilidad de la actividad económica y justificar su destino.
En caso de impago, el acreedor puede reclamar la deuda, pero al no haber avales reales, el procedimiento suele limitarse a reclamaciones judiciales ordinarias, sin ejecución hipotecaria u otras garantías.
Consejos prácticos antes de solicitar un microcrédito
¿Estás dispuesto a dar el paso de pedir un microcrédito para emprendedores? Puede ser una opción magnífica. Pero antes de hacerlo haz una última valoración y ten en cuenta varias recomendaciones.
- Comparar ofertas. Las condiciones varían según la entidad. Analiza el tipo de interés, los plazos y la flexibilidad del pago.
- Haz una valoración de lo que necesitas. No pidas ni de menos ni de más. Calcula exactamente cuánto necesitas para arrancar el negocio o darle ese impulso que buscas.
- Invierte tiempo en el plan de negocio. Cuanto más riguroso sea, mejores posibilidades de aprobación.
- Consulta a un asesor jurídico para revisar cláusulas y garantizar tu protección.
¿Alguna duda? ¿Algo no te ha quedado claro? ¿Quieres solicitar un microcrédito, pero no sabes cómo, ni cuál te vendría mejor o se adapta mejor a tu negocio? Desde Legálitas Negocios podemos ayudarte.
Referencias legales:
Ley 5/2015, de 27 de abril, de fomento de la financiación empresarial
Ley 16/2011, de 24 de junio, de contratos de crédito al consumo