¿Puedo crear una empresa en España si soy estudiante extranjero?
19 Junio 2025
¿Te gustaría lanzar tu propio negocio mientras estudias en España? La verdad es que la legislación actual favorece esta posibilidad, haciéndola más accesible incluso para quienes vienen de fuera de la Unión Europea. Por supuesto, el camino tiene sus particularidades. Así que es importante que conozcas cada paso, cada requisito y cada ley implicada en la creación de la empresa. Te lo explicamos todo.
¿Qué dice la ley? ¿Puedes realmente crear una empresa siendo estudiante extranjero?
En efecto, es posible hacerlo. Eso sí, la legislación española establece una serie de condiciones y matices que debes tener en cuenta.
Con la entrada en vigor del Real Decreto 1155/2024, que actualiza la Ley Orgánica 4/2000, la normativa sobre extranjería se ha adaptado a las necesidades del emprendimiento internacional. Los estudiantes extranjeros pueden compatibilizar su estancia por estudios con el trabajo por cuenta propia, siempre que obtengan la autorización correspondiente.
Esto abre la puerta a que, si cumples los requisitos, puedas gestionar tu empresa legalmente mientras estudias. Además, debes tener en cuenta otras leyes que serán referencia para desarrollar el proceso de emprendimiento como la Ley 14/2013, de apoyo a los emprendedores y su internacionalización.
Junto a ellas, el Código de Comercio y la Ley de Sociedades de Capital regulan la constitución y funcionamiento de las empresas en España. También para las personas nacidas fuera del país.
Dicho lo cual, una parte esencial en el proceso es tu nacionalidad. El proceso es mucho más sencillo si eres ciudadano de la Unión Europea: basta con que obtengas tu NIE y el certificado de registro de la UE para poder emprender sin restricciones adicionales. Este último es el documento que te permite poder residir en España durante un periodo de tiempo superior a los tres meses.
La situación es un poco más compleja si tu origen es extracomunitario. Puedes crear la empresa, pero, para que puedas trabajar en ella, necesitarás un permiso de residencia y trabajo por cuenta propia. Si solo quieres ser socio capitalista, eres ciudadano no residente y el trabajo lo realizan empleados con permiso de trabajo, no necesitas este permiso, pero sí deberás cumplir con otras obligaciones legales.
- No estar en situación irregular en España ni tener prohibida la entrada.
- No tener antecedentes penales en España ni en otros países de residencia.
- Acreditar la cualificación profesional o experiencia necesaria para tu actividad.
- Demostrar que tienes medios económicos suficientes para la inversión inicial y para tu manutención.
- Cumplir con la normativa para la apertura y funcionamiento del negocio.
Si no tienes permiso de trabajo en España, la ley te permite crear la empresa, pero no puedes trabajar en ella directamente. En este caso, deberás nombrar a un representante fiscal residente en España y contar con socios o empleados que sí tengan permiso de trabajo para gestionar la actividad diaria.
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¿Cuáles son los pasos para crear una empresa en España siendo estudiante extranjero?
Seguro que tu vocación de emprendedor te estimula y, con el apoyo de abogados expertos, te va a resultar sencillo poner en marcha ese negocio que te ilusiona desarrollar mientras estudias en España. Para que lo tengas un poco más claro, te detallamos cada uno de los pasos que deberás seguir
Define tu idea y elabora un plan de negocio
Antes de comenzar con los trámites legales, es fundamental que tengas claro qué actividad quieres desarrollar y que elabores un plan de negocio. Este documento te servirá como guía y podrá ayudarte en la solicitud de permisos o la obtención de financiación.
Elige la forma jurídica de tu empresa
La elección de la forma jurídica es un punto troncal y depende de tus objetivos, el número de socios y el nivel de responsabilidad que quieras asumir. Las opciones más habituales son:
- Sociedad Limitada (SL). Es la más popular por su flexibilidad y porque limita la responsabilidad de los socios al capital aportado.
- Sociedad Anónima (SA). Adecuada para proyectos de mayor envergadura y que requieren captar capital mediante la emisión de acciones.
- Autónomo o Emprendedor de responsabilidad limitada (ERL). Ideales si quieres trabajar en solitario y limitar tu responsabilidad.
- Sociedad cooperativa. Para proyectos en los que varios socios trabajan juntos y comparten la gestión.
- Sucursal. Una opción si ya tienes una empresa en el extranjero y quieres operar en España.
Obtén tu NIE
El Número de Identificación de Extranjero (NIE) es imprescindible para cualquier trámite empresarial en España. Si eres estudiante, probablemente ya lo tengas. Si no, deberás solicitarlo en la comisaría de policía o en el consulado español de tu país.
Reserva el nombre de tu empresa
Debes elegir un nombre para tu empresa y comprobar que no esté registrado. Para ello, solicita el Certificado Negativo de Denominación Social en el Registro Mercantil Central. Este certificado garantiza que el nombre está disponible y lo reserva durante seis meses.
Redacta los estatutos
Son las reglas que regirán el funcionamiento de tu empresa. Los estatutos tienen que definir el objeto social (actividades que realizará la empresa), el domicilio social, el capital social, los órganos de administración y las normas de funcionamiento interno.
Abre una cuenta bancaria
En ella tendrás que depositar el capital social mínimo exigido para la forma jurídica que hayas elegido.
Firma la escritura pública de constitución
Acude a un notario para formalizar la constitución de la empresa. En este acto, todos los socios deben estar presentes. En caso de que alguno no hable español, es importante contar con un traductor jurado. La escritura incluye los estatutos, los datos de los socios, el capital social y la designación de los administradores.
Solicita el CIF provisional
El Código de Identificación Fiscal provisional te permitirá realizar trámites administrativos y fiscales antes de la inscripción definitiva en el Registro Mercantil.
Inscribe la empresa en el Registro Mercantil
Presenta la escritura pública en el Registro Mercantil de la provincia donde tenga su domicilio social. Este trámite otorga personalidad jurídica a la empresa y es obligatorio para operar legalmente.
Obtén el CIF definitivo
Una vez inscrita la empresa, solicita el CIF definitivo en la Agencia Tributaria. Este número es necesario para facturar y cumplir con las obligaciones fiscales.
Alta en la Seguridad Social
En el caso de que vayas a trabajar en la empresa, deberás darte de alta como autónomo o realizar los trámites necesarios para contratar empleados. Si solo eres socio capitalista y no trabajas en la empresa, este paso no es necesario.
Cumplir con las obligaciones fiscales y administrativas
Por supuesto, una vez constituida la empresa, deberás cumplir con una serie de obligaciones fiscales y administrativas, como la presentación de impuestos (IVA, Impuesto de Sociedades), la contabilidad y la presentación de las cuentas anuales.
Ten en cuenta los requisitos específicos según la actividad
Cada actividad puede requerir permisos o licencias específicas. Identificar y cumplir con todos los requisitos legales y reglamentarios sobre aspectos como el medio ambiente o la sanidad y aplicables a la actividad de la empresa, es algo que no puedes pasar por alto. No lo olvides: siempre revisa los requisitos específicos de tu ayuntamiento y comunidad autónoma, como licencias de actividad, permisos urbanísticos o sanitarios.
Si tienes más dudas a la hora de crear una empresa en España, consulta nuestros planes de negocios de Legálitas y te ayudamos en lo que necesites.
Referencias legales
Ley 14/2013, de 27 de septiembre, de apoyo a los emprendedores y su internacionalización
Real Decreto de 22 de agosto de 1885 por el que se publica el Código de Comercio
